Un operativo conjunto entre las fuerzas de seguridad de Bolivia, Brasil y Perú permitió capturar a cuatro personas involucradas en el asalto y robo de armamento en una unidad militar boliviana, informó hoy una fuente oficial.
Los resultados de estas acciones fueron presentados en la ciudad norteña de Cobija, fronteriza con Brasil, por el ministro boliviano de Gobierno (Interior), Carlos Romero, en una rueda de prensa en la que también participó vía Skype su homólogo peruano, Mauro Medina, y a la que asistieron representantes de la policía brasileña.
«Nuestra intención es dar una respuesta contundente y un mensaje claro a las organizaciones criminales que se mueven en territorio boliviano, brasilero y peruano de que vamos a responder de manera conjunta», sostuvo Romero.
Según la autoridad boliviana, la táctica conjunta se realizó hace tres días en la localidad peruana de Puerto Maldonado, cercana a la frontera con Bolivia, donde aprehendieron a tres brasileños y una cuarta persona con doble nacionalidad sin especificar.
Entre los capturados está el líder de la organización criminal y también se logró recuperar cuatro fusiles robados que estaban enterrados en el lugar.
«Este es un golpe muy fuerte y vamos a actuar con mano dura como lo hemos hecho ahora», recalcó Romero.
El suceso ocurrió en junio pasado, cuando una decena de sujetos, entre brasileños y bolivianos, ingresaron a una unidad naval en la Capitanía Bruno Racua, en la localidad boliviana de Porvenir, y sustrajeron nueve fusiles, 11 cargadores y cinco pistolas.
Durante el suceso resultaron heridos algunos militares bolivianos, incluido uno que recibió un disparo en el rostro y que logró salvar su vida.
Las autoridades bolivianas resolvieron entonces reforzar la seguridad en el departamento amazónico de Pando con la presencia de grupos de elite de la Policía y el Ejército, además de redoblar el personal de investigación para hallar a los responsables.
Hasta el momento han sido detenidas siete de las once personas que supuestamente integran esta organización criminal, explicó el ministro Romero.
Según la autoridad, el robo tenía la finalidad de «fortalecer logísticamente» la organización y se presume que pretendían «dar un golpe» en Perú.