Especialistas de Bolivia y Reino Unido trabajan de conjunto ayer en aspectos técnicos del megaproyecto del Corredor Ferroviario Bioceánico de Integración, en el cual la nación europea aportará su experiencia en el sector.
«Estamos trabajando en los detalles técnicos que van a determinarse» y por ello están en contacto con el ministro de Obras Públicas, Milton Claros, afirmó al periódico Cambio el embajador de Gran Bretaña, James Thornton.
El diplomático reiteró la predisposición de su gobierno de profundizar los términos que permitan concretar el plan, con talleres y ayuda para la planificación.
En marzo pasado esta nación manifestó su disposición de sumarse al proyecto de integración más importantes de la región, obra considerada el Canal de Panamá del siglo XXI, que unirá los puertos Santos, en Brasil, con el Ilo, en Perú, tras atravesar territorio boliviano.
Con una longitud calculada de tres mil 750 kilómetros, la línea férrea conllevará una inversión de 14 mil millones de dólares, proyecto en el que han confirmado su participación otros países, como Perú, Brasil, Paraguay, Uruguay, Alemania, Suiza, Austria y España.
Según el embajador Thornton, pondrán a disposición de este proyecto toda la experiencia que tiene su país en la construcción trenes, tal como lo hicieron con los ferrocarriles en Bolivia desde el siglo XIX.