Políticos opositores y expresidentes criticaron este martes el informe de gestión del presidente del país, Luis Arce, por haber omitido temas como el conflicto por la realización del censo de población que tiene a Santa Cruz en huelga desde hace 18 días.
«Es tiempo de sustituir los maratónicos e inútiles informes presidenciales por debates parlamentarios plurales en los que se puedan contrastar los datos e ideas de interés del pueblo», escribió en Twitter el expresidente Eduardo Rodríguez Veltzé (2005-2006).
Por su parte, el exmandatario Carlos Mesa (2003-2005), que también lidera a la mayor fuerza opositora con representación en el Parlamento, cuestionó que Arce no se haya referido a temas como los conflictos por el censo o la situación de los derechos humanos en el país.
«Cuando el país esperaba un informe honesto y una palabra que convoque a la paz y al reencuentro, el presidente decepciona usando 150 minutos para repetir cifras dudosas de un país irreal y amenazar a Santa Cruz, invisibilizando graves problemas en la economía, el censo y los DDHH», señaló Mesa también en Twitter.
Santa Cruz lidera las protestas para que el censo de población sea en 2023 y no en 2024 como lo definió el Gobierno de Arce.
El empadronamiento debía realizarse este 16 de noviembre, pero en julio el Ejecutivo nacional anunció su postergación a 2024 alegando razones técnicas.
Una comisión «técnica» trabaja desde hace cuatro días en la ciudad de Trinidad para fijar la fecha definitiva, aunque algunas regiones han desahuciado esa labor al considerar que la decisión gubernamental es mantener el calendario del proceso como está con el argumento de que la propuesta para el censo en 2023 no fue sustentada.
En una declaración a los medios, el gobernador de Santa Cruz, el opositor Luis Fernando Camacho, y el presidente del Comité Cívico Pro Santa Cruz, Rómulo Calvo, criticaron que Arce no haya hablado de asuntos importantes como el narcotráfico, las reservas internacionales o el conflicto por el censo.
Para Calvo, el discurso del presidente estuvo «lleno de mentiras», «soberbia» y «números falsos» que no coinciden con «la realidad que estamos viendo los bolivianos».
Mientras Camacho lamentó que el mandatario no se refiriera al «verdadero problema en el que estamos» y que con 18 días de huelga en Santa Cruz «no se le ocurrió tocar el punto, ni mostrar voluntad, ni siquiera preocupación».
También consideró que el mensaje estuvo «cargado de pobreza, de confrontación» e «imaginándose que lo quieren derrocar o que lo quieren desestabilizar».
El mandatario centró el informe presentado en esta jornada ante el Legislativo en los logros económicos de su Administración en estos los años de gestión.
Casi al final del mensaje, Arce pareció aludir al conflicto al señalar que «algunos grupos quieren volver a desestabilizarnos» y expresó su confianza en que el pueblo movilizado «vencerá todo este tipo de adversidades».