Importantes decisiones se esperan del nuevo período de sesiones que Naciones Unidas inicia hoy con el concurso de varios gobernantes del mundo que conocerán informes y estudios de diversas comisiones sobre temas latentes, entre los que figura como foco principal el medio ambiente. A Bolivia debería interesarle esta reunión tanto por la afectación que sufre en este momento con los incendios forestales de magnitud nunca antes vista, como por las soluciones que se han aportado para diversos problemas de los países que más sufren las consecuencias del cambio climático. Pero naturalmente, que estas soluciones que parten de un efectivo apoyo en financiamiento, tienen como condiciones un auténtico compromiso con el medioambiente, que nuestro país en este momento está lejos de cumplir.
Las reuniones que comienzan este lunes se desarrollarán durante todo el mes de septiembre, con la participación de representantes de los Estados Miembros de las Naciones Unidas que inicialmente se reúnen en la Asamblea General en Nueva York para debatir las cuestiones fundamentales de interés mundial. Un informe de la ONU señala que este año, además del debate general, los dirigentes del mundo participarán en una serie de cumbres y reuniones de alto nivel para impulsar la acción sobre el cambio climático y acelerar los progresos en materia de desarrollo sostenible, con objeto de conseguir una vida saludable, pacífica y próspera para todos. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que fueron adoptados por todos los líderes mundiales en 2015, serán la base de las decisiones que se adopten.
Naciones Unidas explica que los 17 ODS interconectados son un llamado universal a la acción para acabar con la pobreza y el hambre, ampliar el acceso a la salud, la educación, la justicia y el empleo, al tiempo que proteger nuestro planeta de la degradación ambiental. Este 23 de septiembre se inaugura la Cumbre sobre la Acción Climática. Los efectos del cambio climático se están acelerando, pero, mediante la acción urgente y transformadora, todavía es posible limitar el aumento de la temperatura media mundial a 1,5ºC por encima de los niveles preindustriales, evitando las consecuencias más desastrosas. En esta cumbre, Gobiernos, empresas y sociedad civil propondrán soluciones encaminadas a reducir las emisiones, aumentar la resiliencia y la adaptación al cambio climático.
Mañana, martes 24 y miércoles 25 de septiembre se desarrollará la Cumbre sobre los ODS, que hará seguimiento al cumplimiento de la Agenda para 2030 para el Desarrollo Sostenible y sus 17 objetivos. Naciones Unidas considera que está, sin duda, fue la más ambiciosa iniciativa nunca emprendida para transformar nuestro mundo a fin de impulsar la prosperidad y garantizar el bienestar de todos, protegiendo a la vez el medio ambiente. Sin embargo, es necesario adoptar más medidas para asegurar que estamos en camino de alcanzar los Objetivos y no dejar a nadie atrás. La Cumbre sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible permitirá a los dirigentes mundiales y a otras partes interesadas demostrar cómo prevén acelerar las medidas para transformar nuestras sociedades y economías, a medida que nos acercamos al quinto aniversario de la aprobación de los Objetivos y cuando queda poco más de un decenio hasta que se cumpla el plazo de 2030.
Para el miércoles 26 de septiembre está previsto el Diálogo de Alto Nivel sobre la Financiación para el Desarrollo. Este es uno de los principales desafíos para la consecución de la Agenda 2030, dado que las inversiones que son decisivas para alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible siguen careciendo de fondos suficientes. Las medidas restrictivas al comercio, también se han acelerado y los riesgos de la deuda están aumentando, lo que perjudica la capacidad de muchos países para invertir en los ODS. El Diálogo de Alto Nivel sobre la Financiación para el Desarrollo congregará a líderes de los Gobiernos, las empresas y el sector financiero, entre otros, para ayudar a desbloquear los recursos, concertar las alianzas necesarias y acelerar los progresos. Sin duda, sin financiamiento será imposible alcanzar las metas hasta 2030, por lo que es necesario consolidar los compromisos de aportes efectuado tanto por los países que más contribuyeron al cambio climático, como por las potencias y Estados comprometidos con los esfuerzos para evitar que el planeta colapse al ritmo actual de destrucción de la naturaleza.