El mundo ha logrado dar un salto cualitativo masivo al desarrollar las telecomunicaciones haciendo posible ver al instante lo que ocurre en cualquier parte del mundo. Ha logrado acercar a las personas, agilizar los negocios, ampliar la libertad de expresión impulsar la transmisión de información, masificar el conocimiento, apoyar a la educación y hacer posible la sociedad de la información. Y en este vertiginoso avance tecnológico la Internet se ha convertido en el explosivo medio de vínculo familiar, social, empresarial, laboral, de investigación y como instrumento imprescindible para toda actividad. Hoy 17 de mayo, precisamente se recuerda el Día Internacional de las Telecomunicaciones; el Día de la Sociedad de la Información, y el Día Mundial de Internet promovido por la Asociación de Usuarios de Internet e Internet Society.
En Bolivia, pese a las limitaciones propias de un país que no logra despegar, especialmente en tecnología, las telecomunicaciones también han dado un gran salto. En los últimos 40 años se han producido importantes avances al extremo que la telefonía, que antes era un privilegio de unos pocos, se ha masificado con los celulares y hoy el 80% de los bolivianos tienen acceso a este revolucionario medio de comunicación que se ha convertido en un compañero imprescindible en la vida cotidiana. A ello se suma la red Internet, que en Bolivia, pese a ser la más lenta y precaria, se ha convertido en el medio de contacto con la realidad, la modernidad, la actualidad y está logrando desplazar a los medios tradicionales de comunicación. La televisión ahora se sirve del Internet lo mismo que la radiodifusión y los periódicos llegan a más lectores gracias a las ediciones digitales. Durante la pandemia de coronavirus la Internet ha demostrado que llegó para quedarse y avanzar en los hogares, el trabajo, la educación y la vida diaria.
El Día del Internet se celebró por primera vez el 25 de octubre de 2005, de acuerdo al portal «Día Internacional De», pero la Cumbre de la Sociedad de la Información celebrada en Túnez en noviembre de 2005, decidió proponer a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) la designación del 17 de mayo como el Día Mundial de las Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información, trasladando el Día Mundial de Internet a dicha fecha. El uso de internet ha cambiado la forma de relacionarnos con el mundo, traspasando las barreras de la comunicación y las fronteras geográficas. Diversos sectores (comercio, gobierno, educación, salud, entre otros) han sido impactados por las redes de información, generando avances que benefician a la humanidad.
Quién iba a pensar en los años 70 y 80, que se podría utilizar la tecnología como herramienta de apoyo en nuestra vida cotidiana, como buscar una receta de cocina al instante y con un solo clic, reservar un vuelo o hacer compras online o trabajar desde el hogar. Estas facilidades son solo algunas de las ventajas de la universalización de Internet. Aspectos esenciales como la educación o la sanidad han registrado notables avances gracias a las nuevas tecnologías y el acceso a Internet: estudios y avances en el control y erradicación de enfermedades y aplicación de tratamientos y procedimientos médicos, telemedicina, fomento de la alfabetización digital y audiovisual, desarrollo del autoaprendizaje.
En el séptimo Informe Especial emitido por la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) se analizan los avances y limitaciones en el uso de las tecnologías e Internet, como un elemento clave en la actual pandemia por covid-19, así como la aplicación de soluciones digitales en la disminución del impacto por las medidas de contención del virus, cuarentena y distanciamiento social. En el ámbito laboral se destaca el mejoramiento en las condiciones de trabajo, simplificando los procesos de producción, así como el desempeño de tareas y funciones, favoreciendo la comunicación y el intercambio de información.
El derecho de acceso a internet es reconocido por la Organización de las Naciones Unidas como un derecho humano fundamental de las personas, vinculado a la libertad de expresión. La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), establece que el derecho de acceso a Internet debe garantizar la conectividad y el acceso universal a la infraestructura de Internet y a los servicios de las tecnologías de la información y la comunicación de manera equitativa, económicamente accesible y con una calidad adecuada.
En tal sentido, los estados y naciones de todo el mundo deben garantizar el acceso a internet sin restricciones, entre otros derechos humanos fundamentales, contemplado en su normativa legal y jurídica: Promover el acceso universal a Internet para garantizar el disfrute de derechos humanos como la libertad de expresión, la educación, la atención de la salud y el trabajo. Generar mecanismos regulatorios que fomenten el acceso a Internet, especialmente en las poblaciones más vulnerables, zonas rurales y áreas alejadas de los centros urbanos. Promover puntos de acceso públicos a tecnologías de información y comunicación. Concienciar a la población sobre el uso adecuado de Internet, así como sus beneficios. Asegurar el acceso equitativo a Internet para personas con discapacidad, y para los adultos mayores.