El Gobierno desconoció este lunes las acciones de la Defensora del Pueblo, Nadia Cruz, al considerar que esa funcionaria está usurpando el cargo porque su mandato interino de 90 días feneció en abril de 2019.
El Ejecutivo justificó ese desconocimiento con el antecedente de una sentencia constitucional de 2004 que indica que un interinato en la función pública tiene como duración máxima 90 días, plazo que venció el 30 de abril de 2019 en el caso de Cruz, dijo a los medios el viceministro de Seguridad Ciudadana, Wilson Santamaría.
«Por lo tanto, en aplicación estricta de esta sentencia, el interinato de Nadia Cruz ha fenecido y todos los actos que ha realizado a partir del 30 de abril son nulos de pleno derecho, existiendo responsabilidad por sus acciones y la disposición en esa institución», sostuvo.
Nadia Cruz fue designada por el Legislativo como Defensora del Pueblo interina tras la renuncia de su predecesor, David Tezanos, a fines de enero de 2019 por conflictos personales.
Según Santamaría, la Asamblea Legislativa «ha incumplido deberes» al no haber llevado a cabo un nuevo proceso de convocatoria para la selección y designación del nuevo Defensor del Pueblo tras la renuncia de Tezanos.
«El Gobierno entiende que el funcionamiento de esta instancia (la Defensoría del Pueblo) hoy se encuentra usurpado por una autoridad cuyo mandato ha fenecido y que por lo tanto sus acciones son nulas de pleno derecho», manifestó.
Por ello, el Ejecutivo decidió devolver toda la correspondencia y requerimientos de información enviados por la Defensoría con la firma de Cruz, al entender «que esta autoridad ejerce el cargo de manera ilegal».
Santamaría también expresó preocupación por un supuesto vínculo de la Defensora interina con el partido del expresidente Evo Morales, el Movimiento al Socialismo (MAS), por la participación de la funcionaria en «en cabildos, en concentraciones electorales» de esa organización política.
«Nos preocupa muchísimo que este interinato haya recaído en alguien que ha perdido independencia, que ha actuado con clara parcialidad y que responde a intereses mucho más partidarios que verdaderamente humanos, que son los conceptos en base a los cuales debe funcionar esta institución», enfatizó.
Cruz ha sido crítica del Gobierno de Jeanine Áñez, que por su parte ha acusado varias veces a la funcionaria de no ser imparcial.