El Gobierno del presidente Luis Arce pidió este domingo una «profunda y amplia reflexión» interna en el Movimiento al Socialismo (MAS) para evitar fracturas en el partido oficialista, a propósito de la conmemoración del primer triunfo electoral de Evo Morales en 2005.
El Ejecutivo recordó en un comunicado que este 18 de diciembre el oficialismo celebra un año más de la «histórica victoria política y electoral» de Morales y el MAS que les permitió emprender «un camino de profundas transformaciones» que continuaron cuando Arce ganó los comicios generales de 2020.
El Gobierno de Arce lamentó que se haya hecho «una serie de acusaciones infundadas» que «dividen» al partido y no ayudan a tener un «escenario favorable» para una celebración conjunta en el llamado «Día de la Revolución Democrática y Cultural».
Entre las acusaciones «falsas», el comunicado enumera y niega una serie de dichos de altos dirigentes del MAS, incluido Evo Morales, sobre supuestas traiciones y «pactos» con la oposición, o planes para impedir una eventual candidatura del exmandatario en las elecciones de 2025, entre otros.
«Esperamos que pronto exista una profunda y amplia reflexión al interior de nuestro instrumento político MAS-IPSP a fin de evitar fracturas que, de profundizarse, generará daños que costarán reparar y pondrá en riesgo el proceso más importante de transformaciones para el pueblo boliviano», indica la nota.
Para el Gobierno, no hay que temer a reconocer la existencia de «tensiones internas» en el oficialismo y consideró que la mejor manera de resolver esto es hablando con «franqueza revolucionaria» en espacios internos del partido.
También consideró que el «enemigo interno» no se encuentra entre el mismo oficialismo y que es «imperioso tener sentido del momento histórico» para evitar otro «golpe de Estado por parte de la derecha fascista» que, según el Ejecutivo, «se alegra» y «alienta» lo que está ocurriendo con el MAS.
La Administración de Arce ratificó que es un «gobierno del MAS» y envió un «saludo revolucionario» a Morales y a la militancia oficialista.
En 2016, Morales aprobó una ley que declaró el 18 de diciembre el «Día de la Revolución Democrática y Cultural» para conmemorar que en esa fecha en 2005 el expresidente obtuvo su primera victoria electoral.
En las próximas horas está prevista una celebración por esta fecha en la localidad de Sacaba, en la región central de Cochabamba, convocada por los máximos dirigentes del MAS, presidido por Morales.
La dirección del partido denunció hace unos días en un comunicado que supuestamente un ministro del gabinete político de Arce y un jefe militar «preparan la intervención de infiltrados para perjudicar el acto» en Sacaba, lo que fue negado por el Gobierno.
Las controversias internas en el MAS se ahondaron a partir de la promulgación de una ley sobre el censo de población que puso fin a un conflicto en Santa Cruz, norma que fue calificada de «error histórico» por Morales, quien también hace críticas constantes a algunos ministros de Arce.
También hubo peleas internas por las nuevas directivas en el Parlamento, en el que los llamados «evistas» perdieron algunos espacios de poder.