Los casos de coronavirus han disminuido en nuestro país, en un proceso que los especialistas denominan desescalada de la pandemia, pero alertan sobre los riesgos de un rebrote de la epidemia debido a la relajación de las medidas de bioseguridad que se precipitaron, tanto por las actividades políticas que concentraron multitudes como por descuidos e irresponsabilidad en el servicio de transporte público, mercados y una atenuación en el cuidado de la propia ciudadanía, en la que se advierte una falsa seguridad, que puede tener graves consecuencias.
La OMS ha advertido del riesgo, poniendo como ejemplo los rebrotes en Europa y la necesidad de una protección integral.
La Organización Mundial de la Salud recordó a los gobiernos, dondequiera que estén, su responsabilidad de moverse rápidamente y seguir con medidas de contención para «suprimir las llamas de la pandemia». En Bolivia se logró reducir los contagios con enorme sacrificio de la población, y sería lamentable que la atenuación de la pandemia sea considerada como carencia de riesgos. De hecho, se han presentado aumentos de casos de infectados en algunas ciudades, especialmente en el eje central. Esta situación pone en alerta a las autoridades de salud, quienes temen un rebrote de la pandemia.
La Paz reportó una leve subida de nuevos pacientes positivos, y las autoridades están más atentas a las señales. El asesor del Ministerio de Salud, René Sahonero, exhortó a la población a mantenerse alerta y seguir con las medidas de bioseguridad para evitar una nueva propagación de la pandemia. Todos los días se registran nuevos casos y de acuerdo con datos del Servicio Departamental de Salud (Sedes) La Paz, hay 99 personas internadas con síntomas leves y ocho en terapia intermedia, siendo que esas cifras en anteriores semanas eran más bajas.
Es imprescindible que la población siga con las previsiones, más aún ante la proximidad de la fiesta de Todos Santos, cuando la gente acude a los cementerios a visitar a sus difuntos, lo que se constituye en un riesgo de contagio de esa enfermedad. El servicio de transporte público está ampliando su capacidad pasajeros, y la extensión de horarios de actividades, así como eliminación de restricciones, implican un alto riesgo.
El asesor Sahonero considera que la gente se «relajó» al ver la desescalada de contagios, pero aclaró que el virus aún continúa latente, por lo que se debe mantener el cuidado, la distancia social y la higiene correspondiente. «Las medidas de bioseguridad deben ser parte de nuestra vida, no de un momento, por lo menos hasta que tengamos una solución para el coronavirus», afirmó.
El director de emergencias de la OMS, Michael Ryan, alertó que no se podrá controlar la pandemia si no se aplican las medidas de salud necesarias dentro de las comunidades como el distanciamiento social, evitar multitudes, y usar mascarillas, y deploró que todavía haya gente que cree que el problema no existe. «Nuestro problema y nuestro gran desafío es que no todos aceptan porque no creen en esta enfermedad, no creen que tenemos una pandemia en nuestras manos», declaró Michael Ryan durante la conferencia bisemanal de la Organización. Ryan dijo que es necesario convencer y persuadir a las personas desde los gobiernos, a través de la información y el apoyo.
«Los gobiernos deben persuadir a las personas de hacer lo correcto, pero la gente requiere apoyo, por ejemplo, si tienen que estar en cuarentena, deben tener acceso a los alimentos, a conectividad de internet, necesitan contacto con sus familias», expresó. «Esa es la realidad de ‘mitigar’ una enfermedad en la cara de un tsunami de casos, te quedas sin capacidad para responder, y ese es el miedo ahora mismo, espero que esto no vuelva a suceder», recalcó. El director de emergencias recordó a los gobiernos, dondequiera que estén, su responsabilidad de moverse rápidamente y «suprimir las señales de la pandemia». «Para proteger a los más vulnerables requerimos que la sociedad se una, y se rompan las cadenas de transmisión y la única manera de hacerlo es a través de un contrato social con las comunidades para apoyar ese trabajo y poner las medidas necesarias para que esto suceda», explicó.
En nuestro país, aquellos políticos que señalaban que «no existía la pandemia, que era un invento de Jeanine Añez», si hay rebrote del virus, sería bueno que estén primera línea, junto a los médicos y enfermeras, para constatar que sí existe el coronavirus que parece muta en forma permanente, por lo cual no existe realmente una vacuna para expenderla en forma inmediata a los habitantes del planeta.
De otra parte, es necesario, urgente, prioritario, que se aumente el presupuesto del sector salud, en un 10% cual piden, reclaman, exigen, protestan y efectúan huelgas, los profesionales médicos y paramédicos, ante el peligro de sus vidas, piden se los integre a la Ley General del Trabajo.
Si la pandemia rebrota en Bolivia y la carencia de hospitales de cuarto nivel prosigue, los problemas se multiplicarán para todo gobierno.
Dios libre a Bolivia de la pandemia universal.