Organizaciones cívicas contrarias a la reelección del presidente Evo Morales, marcharán este lunes para exigir la renuncia de los vocales del Tribunal Supremo Electoral, por considerar que favorecen al mandatario y no existen garantías para unas elecciones transparentes.
La movilización partirá del límite entre las ciudades de La Paz y El Alto, con el objetivo de atravesar el centro paceño hasta llegar ante sede del organismo electoral y pedir que sus siete integrantes dimitan.
El presidente del Comité de Defensa de la Democracia (Conade) y rector de la Universidad Mayor de San Andrés de La Paz, Waldo Albarracín, dijo a Efe que la protesta se debe a que el tribunal «ha dado señales de que está actuando a favor de los candidatos de Gobierno».
«Son un órgano que no garantiza imparcialidad y transparencia (…), no puede haber elecciones con un tribunal sucio», manifestó.
Para Albarracín, el ente electoral está «manipulado» por el Gobierno y se teme que en las elecciones generales del próximo 20 de octubre se dé una «manipulación del voto».
Las críticas contra el tribunal también son por haber habilitado al binomio del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS), conformado por el presidente del país y el vicepresidente Álvaro García Linera, a pesar de un referéndum de 2016 que les impidió esa posibilidad.
Pese a esto, Morales consiguió el derecho a la reelección indefinida, gracias a un fallo del Tribunal Constitucional de Bolivia en 2017, y el órgano electoral se apoyó en 2018 en esta resolución para avalar la candidatura.
La movilización convocada por el Conade integra a varios comités cívicos y organizaciones políticas que se oponen a la candidatura.
Al respecto, el diputado del MAS Franklin Flores declaró a Efe que la convocatoria es un acto «antidemocrático», por considerar que va contra el proceso electoral, que ya está en marcha.
«Las reglas están marcadas. El Tribunal Supremo Electoral ha convocado a veedores, las elecciones están ya en carrera», sostuvo el legislador.
El mes pasado el Gobierno firmó un convenio con la Organización de Estados Americanos (OEA) sobre las atribuciones que tendrán los observadores de este organismo en las elecciones del país.
Evo Morales buscará en octubre próximo su cuarto mandato y de ganarlo, lo mantendría al frente del país por el periodo 2020-2025, año este último en que Bolivia conmemorará el bicentenario de su independencia.
El mandatario se enfrenta a ocho candidaturas opositoras, de las que según los sondeos solo parece hacerle frente la del expresidente Carlos Mesa, sin que haya sido posible un frente opositor unido contra Morales.