La flexibilización de las medidas de restricción a la circulación de personas y transporte está supeditada al cumplimiento de las medidas de bioseguridad y otras determinaciones dirigidas a mantener el distanciamiento social y protección, que están contenidas en las normas. Tanto municipios como autoridades departamentales de La Paz, Sucre y Cochabamba, advirtieron que están vigentes las medidas de seguridad para proteger la salud de la población.
Se recordó que las últimas determinaciones del gobierno solamente autorizan parcialmente las actividades públicas y privadas, pero manteniéndose bajo la cuarentena dinámica y condicionada.
Se explicó que condicionada significa el cumplimiento a las medidas de bioseguridad, de manera que en aquellos municipios donde prime el descontrol se puede volver a la cuarentena rígida. Además, se recordó que existen penalidades económicas y otras sanciones para los infractores, que van desde multas por circular en las calles sin mascarillas, por llevar más pasajeros de lo permitido, incumplir normas de salubridad, cierre temporal de negocios que no adopten medidas de bioseguridad, o pongan en riesgo a los clientes, pérdida del derecho a puestos de venta, clausuras, etc.
La Alcaldesa de Sucre, Rosario López, advirtió al sector gremial y a las empresas que acaban de reiniciar su actividad en la modalidad de «cuarentena flexible», que volverá a una cuarentena total y más rígida, si no cumplen estrictamente los protocolos de bioseguridad y las normas establecidas para evitar la diseminación de coronavirus. Aclaró que solo podrán trabajar los gremiales reconocidos que tengan sus trámites ante la Alcaldía y porten la respectiva credencial de su organización.
Ahí está el quid de la cuestión. No todos los gremialistas presentaron a tiempo su documentación, pero igual, requieren trabajar. Cómo le pondrán el cascabel al gato, cuestionan vecinos de varias zonas.