El 2021, año en que La Boliviana Ciacruz Seguros cumplió 75 años de vida institucional, se puso en marcha un nuevo proyecto de Responsabilidad Social Empresarial denominado «Cambiando Historias», mismo que tenía el objetivo de mejorar la calidad de vida de algunas personas del país con discapacidad intelectual, y de sus familias, todos miembros de Olimpiadas Especiales Bolivia, institución con la que la empresa aseguradora desarrolla proyectos hace varios años. El proyecto buscaba que las familias logren mejoras, pero, sobre todo, que puedan generar ingresos que les permitan su sostenibilidad a largo plazo.
Los grandes protagonistas de estas historias han sido: Jorge Pablo Ferrel (15), quien tiene discapacidad intelectual y fisicomotora; Oscar Iquiapaza (26), tiene discapacidad intelectual; Cindy Álvarez (31), tiene discapacidad intelectual leve y discapacidad fisicomotora; José Romero (20), quien es una persona con discapacidad auditiva y leve compromiso intelectual; Regina Alarcón (36), que también tiene discapacidad física con leve compromiso intelectual; y, por último, Anahí Ralde (11), niña con Síndrome de Down.
«El proyecto ha sido innovador y ha logrado influir en la calidad de vida de cada familia. Hemos realizado acciones orientadas a cumplir tres propósitos: fortalecer los emprendimientos de las personas que los tenían; brindar apoyo médico para aquellos que lo necesitaban; y, por último, un trabajo combinado al potenciar los emprendimientos asegurando la producción para que los beneficiados continúen con sus terapias respectivas», mencionó Claudia Mac Lean, directora ejecutiva de Olimpiadas Especiales Bolivia.
El proyecto, que contempló una intervención con tres grandes etapas a corto y mediano plazo, llegó a su última fase con resultados satisfactorios.
Uno de ellos, ha sido el logrado con José Romero, a quien se ayudó a cambiar su vida. Se le otorgaron un par de audífonos, de última tecnología, que le han permitido escuchar y aprender a hablar y tener una mejor relación social con su entorno. Además, con el tratamiento auditivo verbal que desarrolla con un foniatra, ha logrado decir algunas palabras y poder comunicarse con su familia. Todo esto ha sido un gran avance en su vida.
Oscar Iquiapaza, otro de los beneficiados del proyecto, que además es pastelero, obtuvo la donación de capacitación, un carrito e insumos necesarios, por más de un año, para preparar rollos y empanadas de queso y venderlos en la zona donde vive. Oscar ha logrado ser más independiente y, con la colaboración de su mamá, está generando mayor producción e ingresos en su emprendimiento.
Por su parte, la entrega del horno semi industrial, el exhibidor, equipamiento e insumos durante un año que se le realizó a Regina Alarcón, con el objetivo de impulsar su emprendimiento de repostería, está permitiendo impulsar sus ventas, repercutiendo directamente en la mejora de su calidad de vida y la de sus hijos, El poder generar mayores ingresos favoreció a Regina cuando se contagió de Covid-19, gracias a ello, la ayuda llegó en el momento justo y necesario.
Otro de los beneficiados es Jorge Ferrel, quien compartió el apoyo con su mamá, ya que ella recibió capacitaciones y equipamiento completo para la confección de cortinas y generar ingresos propios, y él ha podido acceder a un tratamiento terapéutico con Botox y fisioterapia que le permitirá caminar correctamente y movilizarse de forma independiente, luego de haber tenido daños en su postura y no poder caminar.
Cindy Álvarez también ha sido beneficiada por el proyecto. El haberle otorgado una silla de ruedas ergonómica ha permitido que pueda transportarse con mucha más facilidad y con mayor libertad e independencia en su hogar. Además, con la entrega de insumos durante un año, capacitación y un mostrador, ha logrado potenciar su emprendimiento de repostería y alcanzar una autonomía económica que le permite ahorrar y seguir invirtiendo en su negocio propio.
Por último, en el caso de Anahí Ralde, se vio beneficiada junto a su mamá, ya que a ella le han permitido realizar terapias de fonoaudiología, junto a un especialista, y mejorar su comunicación expresiva, por su parte, a su mamá le entregaron una cocina semi industrial e insumos durante un año para que pueda generar mayores ingresos y así, en un futuro, permitir que su hija continúe con las terapias necesarias.
«Lograr cambiar la historia de estas personas con distintas acciones, nos demuestra que las ganas de superación, el compromiso y la pasión de hacer algo por nuestra sociedad, traspasan fronteras y no hay límites para lograr un objetivo. Estamos agradecidos por permitirnos ser parte de sus vidas, abrirnos sus hogares y acompañarlos en este cambio», indicó Laurent Bertaux, vicepresidente Ejecutivo de La Boliviana Ciacruz Seguros.
Poner en marcha cada uno de estos sueños, ha sido un reto, y nos impulsa a continuar acompañando a cada uno de los beneficiados y poder verlos alcanzar la meta que, desde el principio del proyecto, nos propusimos: cambiar su historia de vida. Continuaremos apoyándoles, ese es nuestro compromiso», concluyó Bertaux.
Mac Lean indicó que desarrollar este programa ha sido algo nuevo para ellos, pero de la mano de La Boliviana Ciacruz Seguros se han logrado importantes resultados, «hemos podido fortalecer nuestro compromiso social y LBC Seguros apoyó la dotación de insumos, tratamientos y herramientas para que estas familias puedan volar solas».
Conociendo de cerca cada una de estas historias, y con el objetivo de continuar mejorando la calidad de vida de estas personas, la compañía seguirá brindando apoyo y atención médica a tres beneficiarios.
Esta campaña ha sido una destacada acción de Responsabilidad Social Empresarial de la aseguradora, que acompaña la alianza con Olimpiadas Especiales Bolivia y está alineada al Pacto Global de las Naciones Unidas (ODS 10) referido a la reducción de las desigualdades. LBC Seguros continuará fortaleciendo el desarrollo de una sociedad más inclusiva permitiendo el apoyo constante a las personas menos favorecidas del país.