Los militares cuentan con unas mascarillas especialmente diseñadas para sus labores frente al coronavirus, desarrolladas en el país con características como filtros con esencia de eucalipto, ligereza a la vez que resistencia y adaptabilidad para que sean cómodas en su uso.
Los barbijos fueron diseñados por estudiantes de mecatrónica de la Escuela Militar de Ingeniería, con una elaboración «autofiltrante de combate», destacó el Ministerio de Defensa del país, cuyo titular interino, Luis Fernando López, recibió una de estas mascarillas en un acto en La Paz.
El director ejecutivo de esta escuela militar, coronel Iván Omonte, explicó que el tapabocas fue confeccionado especialmente para los militares desplegados en labores de prevención del COVID-19, con un diseño en polietileno de alta y baja densidad, que resiste impactos y al fuego hasta 110 grados centígrados, a la vez que es de fácil desinfección, según un comunicado de Defensa.
Las mascarillas tienen unos filtros reemplazables de cuatro capas de tela no tejida, que evitan que las partículas del COVID-19 puedan ingresar, impregnados con esencia de eucalipto y con un diseño ergonómico semiflexible, más cómodo para su uso, con doble cinta para agarrarlo a la nuca sin forzar las orejas.
La producción diaria es de 500 unidades y está previsto dotar con 5.000 al Ejército, de acuerdo a la nota.
Los reportes de Defensa registran un fallecido y 286 contagiados de coronavirus entre el Ejército, la Fuerza Aérea y la Armada, donde en el conjunto del país los decesos suman 475 y 13.949 los casos confirmados, de acuerdo a datos oficiales.
El Gobierno decretó estado de emergencia sanitaria desde el pasado 22 de marzo, que incluyó medidas como el despliegue de unos 47.000 militares en tareas de control de la cuarentena junto a la Policía, aunque desde el pasado 1 de junio los controles se flexibilizaron en parte del país.