Una multitudinaria concentración se efectuó en la histórica plaza de San Francisco para exigir que los resultados del referéndum del 21F se respete por el gobierno y acate el Tribunal Supremo Electoral.
Los manifestantes se descolgaron de tres puntos estratégicos de la ciudad, contaron con la masiva participación de las Plataformas Ciudadanas, campesinos de Achacachi, de la provincia Ingavi y Larecaja, cocaleros y habitantes de los Yungas, integrantes del Comité de Defensa de la Democracia, gremiales, que preside Francisco Figueroa, Comité Pro La Paz, médicos, universitarios de la UMSA y la UPEA y ciudadanos y ciudadanas de La Paz.
Carlos Mesa y Samuel Doria Medina, líder de Unidad Nacional, fueron algunos de los opositores que se sumaron a la masiva concentración, por la tarde de ayer, en el centro de La Paz, en el mismo lugar donde por la mañana se manifestó el oficialismo.
El discurso central estuvo a cargo del Dr. Waldo Albarracín, de Conade quien señaló que el «pueblo esta emputado, por los abusos de poder del gobierno, de los atentados en contra de las libertades democráticas, del pisoteo de la Constitución Política del Estado, de su intención de incumplir con los resultados del referéndum del 21 de febrero de 2016, de la utilización del Órgano Judicial, de magistrados, vocales, jueces y también de fiscales, para generar miedo en la población y meter presos a inocentes personas».
Pidió que el TSE en forma inmediata haga conocer su resolución.
Dijo «que es un gobierno en el que impera el nepotismo y tiene terror a dejar la presidencia porque se destaparán muchísimas ollas de actos de corrupción».
Manifestó que la Ley de Organizaciones Políticas, es un atentado contra la libertad de los ciudadanos de pertenecer o no a organizaciones partidarias, vulnera su derecho a elegir y ser elegidos sin ataduras a organizaciones políticas, por lo que es necesario exigir la abrogación de dicha Ley.
Planteó la inmediata libertad de los presos políticos entre ellos del dirigente del Comité Cívico de Achacachi, del dirigente de los cocaleros de los Yungas, Francklin Gutiérrez y de otros, detenidos arbitrariamente.
Ponderó el patriotismo de los asistentes que defienden el voto democrático y la vigencia del estado de Derecho.
Cuando fue citando uno a uno los planteamientos efectuados al cabildo, la multitudinaria concentración en tono enérgico y patriótico respondió «aprobado, aprobado, aprobado, y que renuncie, renuncie el fiscal Lanchipa».