El Comité Cívico Potosinista (Comcipo) convocó para este martes a una marcha y cabildo en defensa de Marco Antonio Pumari, exlíder de la entidad, detenido y acusado por destrozos de instalaciones al ente electoral departamental y a un vehículo policial durante la crisis política de 2019.
«Si la protesta es pacífica, evidentemente tiene todas y cada una de las garantías para poder realizarse el día de mañana o cualquier día», aseguró este lunes a los medios el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, en una rueda de prensa en La Paz.
La organización difundió una convocatoria a la Gran Marcha de la Potosinidad como respaldo al que consideran «secuestro» de Pumari al estilo de «las perores dictaduras» además de la declaración de «emergencia y vigilia permanente» de sus instalaciones en Potosí.
Un juez dispuso el sábado pasado la detención preventiva de Pumari, acusado por la quema y destrozos del Tribunal Departamental de Potosí y daños a una patrulla policial en 2019, durante las protestas por los cuestionados comicios nacionales de ese año.
El exdirigente, que también fue candidato a la vicepresidencia del país, fue arrestado en la ciudad de Potosí el jueves pasado por la noche, luego trasladado a Betanzos y finalmente a Lallagua, bastión político del Gobierno y sitio en el que se celebró la audiencia que dispuso su reclusión por 6 meses.
Organizaciones como las juntas vecinales de Potosí se declararon en emergencia y anunciando su respaldo a «futuras determinaciones» que emerjan desde Comcipo, en cuya cabeza está Roxana Graz, puesto que exdirigentes como Juan Carlos Manuel, hasta hace poco presidente de la entidad cívica, dicen que está «a buen recaudo».
En esa línea, gremios como la Federación Sindical de Trabajadores de la Prensa de Potosí alertaron sobre la preocupación que ha generado la llegada de personal policial del interior del país y un supuesto intento de procesar judicialmente a periodistas.
«Es completamente falso, no tenemos ninguna acción legal que se refiriera a miembros de la prensa», declaró a los medios el comandante departamental de Policía, Bernardo Isnado.
La detención de Pumari ha despertado nuevamente el ambiente de polarización que vive el país desde la crisis de 2019, que según el Gobierno fue un «golpe de Estado» y la oposición que mantiene que esos hechos se debieron a un fraude electoral.
Líderes como los expresidentes Carlos Mesa, Jorge Quiroga y el gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, han cuestionado el proceso judicial contra Pumari tildándolo como una vulneración a sus derechos humanos e invocaron a que organismos internacionales se pronuncien.
En tanto que algunos dirigentes y representantes del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) aseguraron que luego se irá por otros líderes de oposición vinculados a los sucesos de 2019.