Wilstermann ganó el encuentro contra Nacional Potosí por 2-1, con goles anotados en tres minutos durante el complemento, después de cerrar el primer tiempo con el marcador abajo y con un hombre menos la tarde del lunes en el estadio Municipal de Sacaba, abriendo la décima cuarta fecha del torneo Apertura.
Los aviadores se libraron de la derrota con una reacción empujada por el coraje y la efectividad para trabajar los centros al área. Las modificaciones que hizo del plantel cochabambino saltaron de la banca al campo de juego para abrirse espacio entre la defensa como ocurrió con el delantero de William Álvarez.
Nacional Potosí se puso arriba en la cuenta a través de Daniel Mancilla, quien sorprendió a los contrarios con la conquista del 1-0 a los 37 minutos, tras recibir una habilitación y dejar pasar por delante a un contrario para quedar delante del pórtico y resolver con un disparo de pierna zurda que no pudo desviar el arquero Arnaldo Giménez.
Los rojos atraviesan por un bajón futbolístico, sin encontrar la posición que les permita salir sin dificultad del enredo en el cual cayeron. Pese a generar ocasiones de peligro, los rojos se marcharon con el marcador en blanco al final de la etapa inicial y lamentaron las ocasiones desperdiciadas por Gilbert Álvarez con el pórtico a disposición y los disparos de Sebastián Galindo despejados por Jimmy Roca.
Además de la falta de puntería, el equipo aviador perdió a Oscar Vaca por expulsión, dejando vulnerable el lateral izquierdo. Sus compañeros tuvieron que redoblar el trabajo de marcación por ese extremo para mantener el equilibrio.
El cuadro de la banda roja aumentó la tensión en el escenario valluno con los contragolpes que eran heridas abiertas en la última línea. Además de ese camino, el cuadro de la Villa Imperial también acudió a los disparos de larga distancia inquietando a Giménez.
El técnico Cristian Díaz ordenó el ingreso de William en reemplazo de su hermano Gilbert. El fruto de esta decisión llegó a los 72 minutos con el tanto de la igualdad por intermedio de un golpe de cabeza del delantero cruceño, en medio de los centrales, ante un servicio largo que llegó desde la posición de Ramiro Ballivián.
En otro servicio, esta vez desde el tiro de esquina, el 2-1 subió en el marcador. La pelota cayó en la ubicación de Alejandro Meleán bajando el esférico y definiendo con un disparo de derecha dentro del área a los 75 minutos ante la desatención en la cobertura de los defensores.
El fútbol wilstermannista mejoró con esa ventaja, pudo controlar el cotejo con la presencia de Serginho y la obstrucción de Didi Torrico. Con esa labor, el equipo valluno escala en la tabla con 23 puntos.