Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), a través de una campaña solidaria interna, reunió siete toneladas de alimentos que fueron entregados a la Unidad de Apoyo a la Gestión Social de la Presidencia, que inició la distribución de este beneficio en favor de unas 1.000 familias vulnerables de La Paz y El Alto, durante la emergencia sanitaria por el coronavirus.
«Valoramos que los trabajadores de YPFB se solidaricen con la población boliviana, agradecemos su compromiso y todos los alimentos son una significativa contribución, en este momento de emergencia», afirmó Carolina Rivera, representante presidencial de la Unidad de Apoyo de Gestión Social.
El lote donado por YPFB contiene arroz, harina, fideo, aceite, agua e insumos de limpieza; la distribución inició el lunes, con ayuda del personal de YPFB y la Unidad de Gestión Social, cuyo objetivo es llegar a por lo menos 1.000 familias, de ambas ciudades, que están integradas por niños pequeños, adultos mayores y personas con discapacidad.
Por su parte, Marco Antonio Calderón, director de Compensaciones Corporativo de la Gerencia de Talento Humano de YPFB, sostuvo que esta recaudación de alimentos y otros insumos fue una iniciativa de los trabajadores de la estatal petrolera.
«YPFB tiene la cultura de solidaridad y más aún en estos momentos, donde la pandemia del coronavirus sacó a relucir la extrema pobreza de hermanos bolivianos que necesitan de un brazo amigo, por esta razón los trabajadores de YPFB del departamento de La Paz se suman a la campaña «Unidos Contra el Coronavirus»», afirmó el funcionario.