El gerente del privado Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE), Gary Rodríguez, afirmó ayer que es necesario impulsar con premura la habilitación de puertos sobre la hidrovía Paraguay Paraná y la construcción de Puerto Bush para dejar de depender de Arica que afecta al comercio nacional por sus constantes paros y la lentitud en la atención de la carga boliviana.
«Con urgencia se debe habilitar los puertos que se tiene en la hidrovía como alternativas, como el caso de Jennefer que fue nombrado hace dos días como internacional, y lo mismo con los puertos Aguirre y Gravetal, además encarar la construcción de Puerto Busch como una cuarta alternativa para que tenga un rendimiento ininterrumpido los 365 días del año con una salida libre y soberana sobre aguas internacionales del Atlántico», explicó a los periodistas.
Rodríguez consideró también que se debe apoyar otras alternativas, como el puerto de Matarani e Ilo, en Perú, aunque dijo que en este último caso se deben hacer inversiones para ampliar su capacidad de servicio.
Lamentó que en este momento en el Puerto de Arica los transportistas bolivianos sufren por sexto día consecutivo un paro por un problema interno de migración de software a una nueva plataforma, que ha ocasionado que centenares de vehículos de transporte de carga de Bolivia estén parados.
«Los despachos que se están haciendo son muy pocos debido a que el sistema no está reconociendo los contenedores de llegada y de salida y no se puede despachar los camiones», recalcó el gerente del IBCE.
Explicó que habitualmente la frecuencia de atención era de 300 a 400 por día, número que se ha reducido a 15, lo que ocasiona un problema de embotellamiento y perjuicios económicos tanto a los exportadores como importadores, «al extremo que el Puerto Arica está asfixiando al comercio exterior», remarcó.