El ministro de Defensa, Edmundo Novillo, manifestó este martes que la reacción en Argentina a su visita a Irán es una «exageración» y un «show político», además descartó categóricamente que se haya hecho alguna «gestión bélica» o que el acta suscrita sea una «amenaza» para el vecino país.
«Para mí es una exageración que responde a un interés político particular de la extrema derecha en Argentina», manifestó Novillo en una conferencia de prensa en La Paz.
Señaló que las reacciones negativas que surgieron luego de su visita a Irán la pasada semana es un «show político», ya que el país vecino «está entrando a una etapa propiamente preelectoral» y que con algunas declaraciones quieren ganar «protagonismo» y «sacarle el rédito político».
«Lo cierto es que en materia de relaciones internacionales lo que prima siempre en todo país es nuestro carácter soberano», señaló.
El ministro sostuvo que su visita a Irán tiene que ver con ciencia y tecnología y que «no es una amenaza, ni pone en riesgo» a que se puedan «generar ataques hostiles», ya que Bolivia es un «Gobierno pacifista».
«Quienes han querido hacer mención de que mi viaje a Irán podría significar un riesgo, una amenaza para la paz, para la región, yo creo que esto es una falacia fantasiosa y sin límites o con intereses netamente políticos», enfatizó Novillo.
Además, descartó «categórica y absolutamente» que su viaje haya sido para hacer «cualquier gestión bélica».
Novillo detalló que en su viaje a Irán se reunió con distintas autoridades y realizó varias visitas a instituciones en especial tecnológicas que podrían ayudar en la lucha contra el contrabando y el narcotráfico en Bolivia y firmó un acuerdo con su homólogo iraní, Mohammad Reza Ashtiani.
Novillo precisó que vio unas maquetas de drones que pueden hacer vigilancia en las zonas fronterizas o fabricaciones navieras que ayuden al mismo objetivo, también observó los avances que tienen en el mantenimiento de aviones y helicópteros y el uso de la nanotecnología.
De la misma forma abordaron el tema de la seguridad cibernética y la geomática para hacer prospecciones de suelos y se firmó un acta luego de la «identificación» de los temas de interés para dar continuidad con ese trabajo, subrayó Novillo.
Aclaró que el acuerdo de cooperación con Irán se firmó en 2007.
La pasada semana trascendieron declaraciones de algunos parlamentarios de Argentina, como del diputado Alberto Asseff, quien consideró que el acuerdo entre Bolivia e Irán era para la «provisión de armamento» y que recibirá drones «como los que entregó a Rusia en la guerra contra Ucrania».
Asseff también cuestionó «cuáles son las hipótesis de conflicto de Bolivia que la llevan a equiparse con modernos armamentos».
Por su parte, la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) expresó su preocupación sobre «los riesgos para la seguridad de Argentina» y exhortó al Gobierno a pronunciarse sobre este acuerdo, y que Bolivia reconsidere su decisión, ya que hubo ataques terroristas en ese país en 1992 y 1994.