La Asociación Nacional de Periodistas demandó este domingo al Gobierno de Luis Arce las «garantías y protección» para que la activista española de 84 años Amparo Carvajal pueda reiniciar sus funciones como presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos, luego de suspender su vigilia.
«Esperamos la pronta restitución de las tareas de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb) y demandamos al gobierno garantías y protección para que Amparo Carvajal pueda reiniciar sus funciones como presidenta de la única entidad defensora de los derechos humanos que goza de legitimidad», indica el comunicado.
Además, saludan la «sacrificada resistencia» de la octogenaria y su «incansable reclamo por la protección que las y los defensores requieren para poder ejercer su labor, libres de intromisiones y abusos».
«Expresamos nuestra admiración por la entereza que mostró ante el sistemático acoso que fue sometida, durante 51 días de vigilia, 12 de los cuales permaneció a la intemperie en una terraza para recuperar el control de la Apdhb», destaca el comunicado.
También resalta que la Apdhb es «garantía de defensa de los derechos humanos, incluido el derecho a la libertad de expresión y de prensa, condiciones esenciales de la democracia».
Carvajal, quien es presidenta de la Apdhb, decidió suspender su vigilia en la terraza de esa instancia el sábado en la noche y bajó del lugar acompañada del cónsul general de España en La Paz, Guillermo Gil.
La activista española decidió iniciar esta vigilia el pasado 2 de junio, luego de que un grupo afín al Gobierno liderado por Édgar Salazar tomara la sede de la Apdhb en La Paz y hace más de una semana la octogenaria se subió a una escalera para llegar hasta la terraza de la sede y continuar su protesta en la que durmió en la intemperie y no tenía acceso a servicios básicos, como el baño.
Salazar asegura tener la representación legal de esa entidad privada, luego de una elección que fue desconocida por Carvajal y sus colaboradores.
Un grupo de mujeres afines a Salazar también realizaron una huelga de hambre al lado de Carvajal en la terraza.
Tanto Carvajal como los seguidores de Salazar dejaron de forma voluntaria las instalaciones de la Apdhb, gracias a las gestiones de la embajada de España, las autoridades bolivianas, así como del defensor del Pueblo, Pedro Callisaya.
La Defensoría del Pueblo saludó la decisión de suspender la vigilia, al igual que Carlos Mesa, líder de Comunidad Ciudadana y sostuvo que hay que estar vigilantes de que «se concrete la devolución de la sede de la Apdhb a su legítima presidenta y se detenga el afán gubernamental de apoderarse de esta institución».