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domingo, mayo 5, 2024
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Hacia una nueva era industrial verde y sostenible

El mundo se dirige hacia una transformación de la industria buscando un modelo sostenible que sirva para cerrar la brecha de desarrollo entre países y cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible. ¿Qué está haciendo Bolivia para fomentar la industria verde? ¿Existen proyectos industriales que se acomoden con las necesidades de protección del medioambiente? Parece que la idea del gobierno es fomentar la producción tradicional, y anuncia la creación de nuevas empresas mineras estatales, así como proyectos basados en los hidrocarburos. Publicaciones de prensa dan cuenta que la Corporación Minera de Bolivia, creará este año dos nuevas empresas estatales en los departamentos de Oruro y Potosí, para explotar yacimientos de plomo, zinc y plata, según anunció el presidente de Comibol, Marcelino Quispe.

Se trata de factorías de mediana categoría que se encargarán de la extracción de minerales complejos: en el proyecto Mesa de Plata, en Potosí, y en el yacimiento de Negrillo, en Oruro. Existen compromisos internacionales para acomodar la economía y la producción hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que tienen como fecha límite 2030, pero parece que se ha decido seguir con la actual política extractivista que atenta contra el medio ambiente. Y no solo eso, se atenta contra proyectos sostenibles como el turismo. Grupos de campesinos tomaron hoteles en el salar de Uyuni. La inseguridad es cada vez mayor en el país.

Mientras tanto la Organización de Naciones Unidas está planteando una transformación productiva que defienda la vida del planeta. Un nuevo informe de la ONU sobre la financiación para el desarrollo sostenible indica que se necesitan inversiones urgentes y a gran escala para agilizar la transformación industrial, incluso en el suministro de electricidad, la agricultura, el transporte y los edificios. El Secretario General de la ONU, António Guterres afirma en el informe que «un mundo a dos velocidades, de ricos y pobres, presenta peligros claros y evidentes para todos los países. Necesitamos urgentemente reconstruir la cooperación mundial y encontrar las soluciones a nuestras crisis actuales en la acción multilateral».

Algunos de estos cambios necesarios ya se están produciendo. La crisis energética provocada por la guerra en Ucrania disparó la inversión en la transición energética mundial, hasta alcanzar la cifra récord de 1,1 billones de dólares el año pasado. Las inversiones en transición energética superaron por primera vez en 2022 al gasto destinado a sistemas de combustibles fósiles, pero casi todas ellas se produjeron en los países desarrollados y China, señala el informe. Recuerda que la industrialización siempre fue un vehículo de progreso que impulsó el crecimiento económico, la creación de empleo, el avance tecnológico y la reducción de la pobreza. Por ello, pide establecer una nueva generación de políticas industriales sostenibles, entre las áreas con grandes oportunidades de crecimiento menciona la agroindustria, la energía verde y la industria manufacturera.

La reciente y rápida asimilación del sector tecnológico muestra las enormes posibilidades de lograr una transición igualmente rápida hacia una industrialización y un crecimiento sostenibles. El aumento del número de personas que usaron internet regularmente entre 2021 y 2022 creció en 338 millones, un incremento de aproximadamente 38.600 personas más por hora. Además, en las regiones que cuentan con conexión a la red de alta velocidad el 44% de las empresas se dedican a la exportación, por solo un 19% de las compañías en las regiones que tienen menor velocidad. En cambio, la capacidad de producción de la industria manufacturera, cayó de alrededor del 10% del PIB en 2000 al 9% en 2021. Para mejorar esta situación, el informe pide implementar políticas específicas para construir las infraestructuras productivas nacionales necesarias que permitan lograr transiciones con bajas emisiones de carbono, crear puestos de trabajo dignos e impulsar el crecimiento económico, garantizando al mismo tiempo la igualdad de género. Considera que los recursos necesarios para esta transformación saldrían de una mezcla de medidas que incluyen el fortalecimiento de los sistemas impositivos, facilitación y potenciación de la inversión privada, y aumento de la inversión pública internacional y de la cooperación al desarrollo.

Propone un marco de decisiones para lograr una reforma eficaz de la arquitectura financiera internacional y alcanzar una transformación sostenible, que debe incluir la reforma de las normas tributarias internacionales, incluidas reglas para gravar los negocios digitalizados y globalizados que satisfagan las necesidades de los países en desarrollo. Los marcos políticos y normativos para mejorar la rentabilidad del sector privado con la sostenibilidad. La transformación de la magnitud y la función del sistema de bancos de desarrollo. Un fondo de pérdidas y daños para el cambio climático, que debe ponerse en marcha rápidamente. El alivio de la deuda y una mejora importante de la arquitectura internacional de resolución de la deuda, dado que el 60% de los países de renta baja se encuentran en situación de endeudamiento o en riesgo de estarlo, y la creación de normas comerciales multilaterales para revisar el enfoque y resolver las actuales tensiones sobre las subvenciones ecológicas.

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