Reducir la pobreza extrema a un cinco por ciento para 2025 en Bolivia, es hoy uno de los objetivos fundamentales de la Agenda del Bicentenario impulsada por el Gobierno del presidente Evo Morales.
Al comparecer en el espacio ‘El Pueblo es Noticia’ del canal Bolivia TV para presentar los 13 puntos de la agenda, Morales destacó el cambio de imagen de la nación en los últimos 13 años, y recordó que en 2005 la pobreza extrema era de un 38,2 por ciento, donde los ricos (10 por ciento) ganaban 128 veces más que los pobres, y en 2018 esa cifra se redujo a un 15,2 por ciento.
«Nos hemos planteado cero de pobreza al 2025 pero este último, el precio del petróleo nos hizo vacilar, nos hizo vacilar como el término exacto como llegar al cero, pero estamos convencidos como llegar con otros programas sociales», indicó.
Remarcó que «estamos convencidos que implementado otros programas sociales vamos a llegar a menos del 5% de extrema pobreza al Bicentenario».
«La redistribución de la riqueza nos ha permitido bajar la pobreza, teníamos el 2006 más de 38 por ciento de extrema pobreza y llegamos al año pasado a menos de 15 por ciento de extrema pobreza», sustentó.
Morales dijo que pidió a las organizaciones sociales propuestas para identificar los lugares o regiones donde existe extrema pobreza para reducir ese índice, además, instó a debatir la extrema pobreza de las ciudades para cumplir esa meta planteada al 2025.
«Cuando llegamos a la presidencia nos propusimos tres puntos fundamentales: en lo político la refundación de Bolivia con una Constitución aprobada por primera vez por el voto del pueblo; recuperación de los recursos naturales con la nacionalización y redistribución de las riquezas», precisó.
Explicó que 2013 y 2014 el precio del barril de petróleo costaba más de 100 dólares, y sobre ese precio pronosticaron llegar al bicentenario con cero pobreza extrema, pero con las variaciones del mercado replantearon esa meta a un cinco por ciento.
Destacó que programas como Mi Agua garantizan el abasto de agua potable en todas las comunidades, y los últimos en beneficiarse con esa estrategia fueron los departamentos de Pando y Beni, aunque seguirán trabajando debido al crecimiento de las comunidades.
El mandatario boliviano recordó que antes importaban Gas Licuado de Petróleo (GLP) siendo productores de gas natural, situación diferente en la actualidad con las exportaciones de ese producto, una vez garantizada la demanda del mercado interno.
Las inversiones en 2005 de la petrolera Yacimiento Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) eran de 200 millones, y con su gestión ascienden a dos mil millones de dólares en exploración, servicios de gas domiciliario, entre otros proyectos, donde el 80 por ciento de los ingresos se quedan en el país, comentó.
«Tengo amigos empresario en Chile que pagan mil dólares al mes por el servicio de gas domiciliario, y aquí cuesta solo 8 bolivianos (1,16 dólares). Esperamos llegar al 90 por ciento de la población con gas domiciliario para 2025», agregó.
En materia de salud, Morales resaltó las más de 17 mil instalaciones creadas para la atención médica en los últimos 13 años, entre ellas hospitales de segundo y tercer niveles.
Asimismo, con la implementación del Sistema único de Salud (SUS) fueron garantizados más de 200 millones de dólares para atender de manera gratuita a los más de cinco millones de bolivianos sin seguro, pero reconoció que queda mucho por hacer para perfeccionarlo.
Morales criticó la postura de algunos médicos que conciben la salud como una mercancía o un negocio al dejar de lado a sus pacientes por paros y huelgas.
Anunció que el Movimiento Al Socialismo-Instrumento Político por la Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP), la Central Obrero Boliviana (COB) y movimientos sociales debatirán en los nueve departamentos el plan de Gobierno para saber dónde existen rezagos para reducir la extrema pobreza, dónde puede aparecer, mejorar los programas implementados o crear otros, sobre todo en zonas urbanas.