Alrededor de 40 bomberos franceses llegaron este sábado a Bolivia para colaborar en el combate de los incendios forestales que afectan al país, un apoyo que se suma a la ayuda humanitaria y material antifuegos que envió Chile para reforzar esa tarea.
En una rueda de prensa, el viceministro de Defensa Civil, Juan Carlos Calvimontes, y la embajadora de Francia en Bolivia, Hélène Roos, indicaron que los bomberos trabajarán en la Chiquitania, una zona en el este del país, donde la situación ha sido crítica en las últimas semanas.
Calvimontes dijo que debido a las últimas lluvias «las circunstancias han cambiado radicalmente», puesto que no existe ningún incendio en Bolivia, por lo que se canalizará el apoyo de los bomberos franceses hacia una cooperación «más integral».
Las tareas asignadas al cuerpo especializado serán de monitoreo de la zona, la realización de cursos de actualización, manejo de tecnologías y gestión de riesgos, entre otras, precisó el viceministro.
«Las esperadas lluvias han llegado, estamos muy felices de eso, debemos trabajar para controlar la situación (…) en las zonas susceptibles de posibles incendios que pudieran descontrolarse nuevamente», dijo la embajadora Roos.
Asimismo, está prevista la llegada de un avión de la Fuerza Aérea de Chile que transportará ayuda humanitaria como alimentos y agua, además de equipos para combatir el fuego, informó la Cancillería de ese país en la víspera.
Esta jornada, el presidente boliviano, Luis Arce, se trasladó hasta la población de Rurrenabaque, una de las puertas a la reserva del parque Madidi, una de las más biodiversas del mundo, para reunirse con los bomberos que trabajan en esa zona.
«Compartimos un momento con los valientes bomberos forestales, que luchan contra el fuego en primera línea y les agradecimos el enorme esfuerzo que hacen por salvar nuestra flora y fauna, arriesgando su propia vida. Tienen todo nuestro reconocimiento», escribió Arce en la red social X (antes Twitter).
Bolivia pidió hace unos días la ayuda internacional de Brasil, Chile, Francia y Venezuela para combatir los incendios que afectaron principalmente la región amazónica de La Paz, y los departamentos de Beni y Santa Cruz, en el este.
El pasado martes, llegaron a Bolivia unos 30 bomberos especializados de Venezuela y unos días después Francia donó 53 cascos a una unidad de la Policía Boliviana especializada en emergencias.
El fuego se atribuye en muchos casos a los llamados ‘chaqueos’, las quemas controladas que se practican en las zonas agrícolas para la habilitación de las tierras para la siembra o el pastoreo.
Indígenas, activistas y organizaciones ambientalistas han pedido que el Gobierno de Arce declare «desastre nacional» por los incendios y anule las normas que desde hace algunos años autorizan los ‘chaqueos’.