El Gobierno creó un grupo de «contrainteligencia» en el caso del presunto narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, quien es buscado hace más de un mes, para establecer si obtuvo ayuda o algún beneficio por parte de alguna institución del Estado para poder fugarse.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, dijo este lunes en una conferencia de prensa que «no se puede descartar que haya existido algún favorecimiento» de policías, jueces o fiscales a Marset, pues se han presentado varias «trabas» en la investigación.
Algunas de las «trabas» que expuso el ministro son el tiempo que se tomó el Ministerio Público para emitir órdenes de allanamientos, requerimientos fiscales, órdenes de aprehensión, entre otros, que a veces se tardaban hasta 72 horas en emitirlos.
«Yo no dudo y no elimino esa probabilidad de que hubiese existido policías que hubieran ayudado a facilitar la fuga de este sujeto», sostuvo Del Castillo.
Este grupo de «contrainteligencia» está conformado por policías y civiles que investigarán a todos los que han participado en operativos relacionados con el caso de Marset, al igual que a otros que no están dentro de las indagaciones, sostuvo el ministro boliviano.
Este reporte será remitido al Viceministerio de Régimen Interior y Policía y en caso de que se detecte algún oficial involucrado será «aprehendido» y «procesado», añadió Del Castillo.
La Policía Boliviana busca a Marset desde hace un mes, tiempo en el que se han realizado 85 allanamientos, 26 personas están en detención preventiva, 54 más son investigados y se ha incautado armamentos, chalecos antibalas, aeronaves, vehículos, celulares, inmuebles, entre otros por unos 25 millones de dólares.
Del Castillo señaló que Bolivia lidera la búsqueda de Marset y es «el Gobierno de la región que más ha afectado a esta organización criminal».
El uruguayo está acusado de liderar una red criminal internacional de tráfico de drogas y, según fuentes periodísticas, también se le relaciona con el asesinato del fiscal paraguayo Marcelo Pecci en mayo de 2022, en Colombia.
Además, cuenta con órdenes de captura de la Europol e Interpol, además de ser requerido por la Justicia en Brasil, Uruguay y Paraguay y por la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA, en inglés).
Marset ha difundido dos videos en medio de la clandestinidad, en uno de ellos agradeció al director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) por alertarle de su captura y en el otro dijo que está fuera de Bolivia y advirtió que si habla «la política de Bolivia se va a la mierda (…) se les complica».