La Central Obrera Boliviana (COB) desconoció este jueves el congreso del Movimiento al Socialismo (MAS) y confirmó su asistencia a una reunión que convocaron organizaciones afines al oficialismo para «recuperar el instrumento» político.
«Los trabajadores han resuelto desconocer el congreso que se ha realizado» del partido gobernante y han propuesto «recuperar el instrumento» para que regrese a manos de las organizaciones sociales, indicó a los medios Juan Carlos Huarachi, el principal dirigente de la COB.
La COB sostuvo una reunión sindical en La Paz con unos 350 delegados en la que se analizó la crisis interna en el MAS, que lidera el expresidente Evo Morales, junto a otros temas de interés del sector obrero.
El llamado Pacto de Unidad, integrado por organizaciones sociales, indígenas y campesinas, convocó para el 17 de octubre, en la ciudad de El Alto, a una marcha y a una reunión para definir su posición frente al MAS, cuyo congreso rechazaron por considerarlo «ilegítimo».
Armin Flores, uno de los dirigentes de la Confederación Sindical Única de Campesinos de Bolivia (Csutcb), dijo que están «tratando de recuperar (el MAS) de una persona que ha querido adueñarse de un instrumento político».
El encuentro del partido se realizó este martes y miércoles en la población de Lauca Ñ, en el Trópico de Cochabamba, bastión político y sindical del expresidente, en el que se eligió a Morales como «único candidato» presidencial del MAS para las elecciones de 2025 y como líder de esa organización, cargo que ocupa desde finales de 1990.
Según la legislación y el estatuto del MAS la candidatura para las elecciones presidenciales se debe definir en unos comicios primarios que están previstos para finales de 2024.
El MAS también definió la «autoexpulsión» del presidente Luis Arce y de su vicepresidente, David Choquehuanca, quienes no asistieron al evento por considerar que la convocatoria no tomó en cuenta a las organizaciones sociales fundadoras del partido gobernante.
La celebración del congreso del MAS profundizó aún más la división que el oficialismo arrastra desde finales de 2021 entre «evistas, afines a Morales, y «arcistas», cercanos a Arce.
Además, el partido de Morales fue notificado este jueves de un amparo constitucional, que presentó una dirigente del bloque «arcista», en contra del congreso del MAS cuya legalidad se analizará en una audiencia judicial el 23 de octubre.
«Vamos a defendernos legalmente, constitucionalmente, técnicamente (y) jurídicamente (…), vamos a defendernos ya sea en las calles, movilizándonos», afirmó el senador Leonardo Loza, del ala «evista» del MAS.
Mientras que el presidente de la Cámara de Diputados, Jerges Mercado, considerado del bloque «arcista», indicó que en Lauca Ñ «hubo una reunión de compañeros y hermanos, pero que «no» puede llamarse congreso.
Para el próximo lunes está previsto que la nueva dirección del MAS, a la cabeza de Morales, se reúna en la ciudad de Cochabamba para la «entrega de la documentación» del congreso e «informar y debatir» con las bases sus resultados.