Las medidas económicas que sacuden a Argentina repercuten en Bolivia que importa muchos productos del vecino país, tanto legalmente como por vía de contrabando, mismos que ahora ya tienen precios más altos. Analistas y entidades empresariales, prevén una serie de consecuencias, entre ellas, una caída en la exportación de productos bolivianos; menos demanda de gas y otra baja en los ingresos para el Estado, que se verá en la necesidad de hacer un mayor gasto por el subsidio a la harina de trigo; se prevé también una menor llegada de remesas de los ciudadanos bolivianos que radican en ese país. Pero también se ven algunas influencias positivas, como la posibilidad de frenar el contrabando, ya que el nuevo gobierno argentino está aplicando medidas drásticas para frenar el paso ilegal de productos hacia nuestro país. Recordemos que el gobierno de Javier Milei aprobó una serie de medidas económicas, de las que algunas impactan directamente a la relación comercial con Bolivia, como la devaluación del peso argentino, la eliminación del sistema de importaciones subvencionadas, y la reducción de subsidios a la energía y el transporte.
El gerente del Instituto Boliviano de Comercio Exterior (IBCE) Gary Rodríguez, considera que el mayor nivel de precios que se da en Argentina puede significar para nuestro país «una inflación importada», porque nuestro país compra más de 700 productos argentinos por un valor de más mil 500 millones de dólares. Pero Rodríguez ve que en toda crisis también puede encontrarse oportunidades. En el caso de Bolivia, dijo que esta situación puede servir para que el Gobierno asuma medidas a favor de los productores. Se refiere al contrabando que llega del sur y que afecta a la industria y a los productores bolivianos en general. Entre las medidas asumidas por el presidente Miley, figura la determinación de cavar zanjas en puntos clave de la frontera que comparte con Bolivia, para evitar el contrabando. La medida fue aplaudida por la Cámara de Industria, Comercio y Servicios de Cochabamba (ICAM), que constantemente demanda una lucha frontal para frenar el contrabando.
Esta ilícita actividad es uno de los factores que más daños ocasiona a la economía nacional y a la sociedad en su conjunto, porque compromete a aproximadamente dos millones de personas y conecta sus alcances con otras tareas del crimen organizado. El contrabando mueve miles de millones de dólares y evade el pago de aranceles e impuestos, que podrían servir para mejorar los servicios básicos, la salud y la educación en el país. A mediados de este año se realizó un seminario denominado «Del Comercio Informal al Crimen Organizado: Los Desafíos de la región frente al contrabando», iniciativa de la Cámara Nacional de Industrias (CNI). En el seminario diferentes autoridades de la actividad comercial, industrial y productiva del país, así como representantes del gobierno, revelaron las cifras que mueve el contrabando son realmente preocupantes. Se dijo, en 2022 el contrabando movió más de tres mil 300 millones de dólares, y que este año probablemente aumente. El contrabando amenaza con acabar con 2.6 millones de empleos legales en el país. Más de 100 mil personas están vinculadas a esta actividad ilícita en las fronteras, y aproximadamente dos millones de personas trabajan con productos de contrabando.
El asesor de la CNI Hugo Siles reveló, con base a estudios de la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB), que el valor que mueve el contrabando equivale al 7,96% del PIB. En 1999 representaba 1.000 millones de dólares anuales, es decir que se incrementó en 203% desde entonces. El año pasado, la evasión tributaria por IVA y Gravamen Arancelario (GA) del contrabando llegó a 930 millones de dólares, y creció 8,72%, que representa el doble del ritmo del crecimiento de la economía. Siles señaló que este delito y su competencia desleal afecta a 38 mil industrias del país y a 600.000 empleos formales, frena la reactivación económica, provoca la desindustrialización evade impuestos, fomenta y actividades delincuenciales.
En el seminario se sugirió la necesidad de aplicar medidas para frenar esta actividad, y que es una necesidad urgente modificar el Código Tributario También se debe modificar los numerales 301 y 31 del artículo 26 de la Ley de Gobiernos Autónomos Municipales para que los municipios participen de la lucha contra el contrabando. En el seminario las autoridades informaron que de Chile, a través de 50 puntos de entrada ilegales, se introducen 1500 tipos de mercadería, ropa usada, línea blanca, línea negra, vehículos indocumentados, alimentos variados, medicamentos y otros. En el caso de Perú hay 27 puntos de ingreso ilegales por donde se internan alimentos agrícolas, ropa con marcas falsificadas, y productos en general. También se informó que el narcotráfico no solo pasa las fronteras mediante diversas maniobras, sino que también compra vehículos ilegales y otros productos pagando con droga.