La dirección nacional del Movimiento al Socialismo (MAS), afín al expresidente Evo Morales (2006-2019), rechazó este miércoles realizar otro congreso como exigen los afines al presidente Luis Arce y reiteraron la «legalidad» del realizado en octubre pasado en Lauca Ñ, a pesar de que fue anulado por el Tribunal Supremo Electoral (TSE).
El vicepresidente del MAS, Gerardo García, afín a Morales, ratificó el congreso realizado en octubre pasado en la localidad del Trópico de Cochabamba, el bastión político y sindical de Morales, y sostuvo que ya no deberían pedir «ningún congreso» y que defenderán la legalidad del mismo.
Sostuvo que Luis Arce les dio la «espalda» y que su Gobierno pretende quitarles la personería jurídica del MAS, por lo que no quiere reconocer el congreso de octubre en el que no participó el mandatario Luis Arce ni el vicepresidente David Choquehuanca.
«Lucho y David que sepan que este pueblo se va a levantar, nosotros les hemos puesto en el Gobierno», aseveró García.
Por su parte, el abogado y delegado del MAS ante el TSE, Diego Jiménez, explicó que sí hubo consenso con las organizaciones sociales matrices para convocar al congreso de Lauca Ñ por lo que el mismo es legal y legítimo, refutando el argumento de que no hubo consenso con los entes matrices.
«Decir que no hubo consenso es una mentira política, que tiene un fin político, tenemos pruebas del consenso y legitimidad del congreso de Lauca Ñ», recalcó.
Jiménez mostró algunas de las invitaciones que realizaron a dirigentes de las organizaciones sociales fundadoras para una reunión en junio pasado en la que se discutió la convocatoria al congreso realizado en Lauca Ñ y que existe un acta de esa reunión, luego se emitió la convocatoria para el congreso de octubre.
Agregó que el TSE debería cumplir la disposición de una jueza de Cochabamba, que determinó que se reconozca el congreso de Lauca Ñ, luego de su anulación.
Pugna oficialista
Más temprano, Morales escribió en sus redes sociales que en el «afán electoralista, algunos en el Gobierno están dispuestos a crear un MAS-IPSP paralelo e ilegal, promoviendo un congreso antirreglamentario vulnerando nuestros estatutos. Ya dividieron a las Organizaciones Sociales, ahora quieren destruir al Instrumento Político».
El martes los principales sindicatos y organizaciones sociales afines a Arce exigieron que la dirección nacional del MAS convoque un nuevo congreso para elegir a la directiva del partido, liderado actualmente por Morales, exigieron respeto y que se deje de promover división y «paralelismo».
Arce y Morales están distanciados entre las tensiones internas en el oficialismo, que comenzaron a finales de 2021 y que se profundizaron por el congreso nacional del partido.
En ese encuentro, Morales fue ratificado presidente del partido y se le nombró «candidato único» para las elecciones presidenciales de 2025, en ausencia de Arce y Choquehuanca, que decidieron no asistir al considerar que las organizaciones sociales, base del partido, no estaban debidamente representadas.
Las tensiones aumentaron aún más después de que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) decidiera anular el congreso y ordenar que se convocara otro.