El Gobierno informó este viernes que encontró dos nuevos «megalaboratorios» de droga en el departamento de Cochabamba en el que cristalizaban cocaína y se procedió a su destrucción.
El ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, informó a través de sus redes sociales que en las operaciones realizadas con la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) encontraron dos «megalaboratorios» de cristalización de cocaína.
Los laboratorios estaban ubicados en la localidad de Chimoré, en el trópico de Cochabamba. Uno con la capacidad de cristalizar hasta 100 kilogramos de cocaína por día y que funcionaba con 12 personas, según información del ministro.
El otro tenía la capacidad de cristalizar hasta 500 kilogramos por día, funcionaba con al menos 40 personas y dejó de utilizarse hace dos semanas aproximadamente, prosiguió Del Castillo.
«En menos de una semana ya hemos dado con un total de 4 megalaboratorios», indicó el ministro.
También dio detalles sobre otros operativos realizados en el mismo lugar, en Chimoré, en el que se encontró otra fábrica de cocaína donde se incautaron más de 11 kilos.
También se incautaron dos kilos de marihuana que eran trasladados hacia el departamento de Santa Cruz en un autobús y en otro caso aprehendieron a dos personas de nacionalidad boliviana que llevaban en un vehículo más de 40 kilos de droga, sin especificar cuál, indicó el ministro.
Esta semana la fuerza antidrogas halló y destruyó dos megalaboratorios ubicados en el Parque Nacional Noel Kempff, ubicado en una de las principales reservas del país que fue declarada Patrimonio Natural de la Humanidad por la Unesco.
Uno de los laboratorios tenía una capacidad aproximada de producir media tonelada de cocaína de alta pureza por día, mientras que el otro estaba en proceso de instalación.
Estos hallazgos se dan un día después de la presentación de un informe de la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (Unodc, por sus siglas en inglés) que indica que en 2020 se realizaron 467 destrucciones de drogas en el país, lo que supone un 14 % menos de estos actos en comparación con los datos de 2019.