El Gobierno informó este miércoles sobre la incautación de más de 207 kilos de cocaína de alta pureza, valorados en casi medio millón de dólares, que estaban escondidos en un tractocamión que hacía el recorrido entre Perú y Brasil.
El hallazgo se produjo durante la revisión en un puesto de control antidrogas en las afueras de La Paz que identificó «modificaciones» a la estructura del vehículo, declaró a los medios el viceministro de Defensa Social, Jaime Mamani.
El viceministro indicó que la droga estaba oculta en dos compartimentos acondicionados en el camión detrás de la cabina y en el remolque en los que hallaron 98 y 109 kilos de cocaína, respectivamente, en forma de paquetes sellados con cinta adhesiva.
La investigación también estableció que el tractocamión llegó de Perú, donde «se había cargado el clorhidrato de cocaína», y tenía el objetivo de llegar hasta Brasil por territorio boliviano, por lo que hay dos personas detenidas, agregó.
En la pesquisa que se realizó el pasado 15 de octubre «se ha logrado afectar al narcotráfico con 453.700 dólares», apuntó el viceministro.
Mamani reportó que en lo que va del año se secuestraron 18,5 toneladas de cocaína de distinta calidad y más de 367 de marihuana en unos 8.273 operativos de las fuerzas antidrogas, en las nueve regiones del país.
Asimismo, dijo que se destruyeron 480 fábricas de «pasta base» de cocaína y 85 laboratorios de purificación de la droga, además de la incautación de 44 aeronaves utilizadas por los narcotraficantes y la destrucción de 65 pistas clandestinas.
El viceministro detalló que también se confiscaron 301 toneladas de hojas de coca, la materia prima para la elaboración de la cocaína, «que estaba siendo desviada a actividades ilícitas».
En Bolivia, el consumo de hojas de coca es legal cuando se trata del consumo tradicional como alimento y medicina además de su uso ritual, aunque organismos como las Naciones Unidas alertaron que parte de esa producción va destinada al mercado ilegal.
La Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (Unodc) estableció en el informe anual a finales del año pasado que en 2021 los cultivos de hojas de coca en Bolivia se incrementaron en un 4 %, de 29.400 hectáreas en 2020 a 30.500 hectáreas en 2021.
Sin embargo, el Ministerio de Gobierno afirmó que los datos del organismo tenían una diferencia mayor de 1.300 hectáreas debido a «errores de medición».