El Régimen Penitenciario desmintió este miércoles que la expresidenta transitoria Jeanine Áñez haya sufrido alguna agresión en prisión y denunció que fue la exmandataria quien «agredió» al personal policial.
La dirección de Régimen Penitenciario negó a través de un comunicado que Áñez haya sido agredida en el penal de Miraflores en La Paz donde cumple su detención preventiva.
«Desmentimos categóricamente tal hecho y denunciamos la actitud de la señora Áñez, quien habría agredido verbalmente al personal policial tras haber intentado entregar información que la misma privada de libertad habría solicitado», señala el comunicado.
Más temprano Carolina Ribera denunció a Efe que una policía ingresó al cuarto de su madre con el objetivo de hacerle firmar una nota que Áñez se negó a rubricar.
Ante esta situación la policía agredió a Áñez y provocó que ella tenga una crisis de hipertensión arterial, contó Ribera quien manifestó su preocupación por la integridad de su madre.
En tanto la senadora opositora de Creemos, Centa Rek, publicó en sus redes sociales unas fotografías de una carta manuscrita firmada por Áñez.
«Esto es violencia, tortura, amedrentamiento en su condición frágil de reclusa», escribió Rek.
La carta de Áñez que está dirigida hacia la directora del centro penitenciario de Miraflores expresa su queja por el maltrato recibido.
«Por medio de la presente me dirijo a usted para presentar mi reclamo por un maltrato del que he sido objeto por parte de una oficial que vino a hacerme firmar como recibida una queja que anteriormente mi persona había hecho», indica una parte de la misiva.
La misma prosigue indicando que la oficial que cree que se trata de la ayudante de la directora del penal «se alteró» faltándole el respeto.
«No he cometido ningún delito como para que se crea con el derecho de dirigirse a mí como una delincuente y salió pateando la estufa que tengo en el cuarto que ocupo», escribió la exmandataria transitoria.
«Le pongo en conocimiento lamentando el incidente porque si ese es el trato con una expresidenta, no quiero pensar el trato que tenga con otra privada de libertad que se encuentre en el penal por haber cometido un delito», finaliza la misiva.
Áñez cumplió esta semana nueve meses de detención preventiva en una cárcel en La Paz por el caso denominado «golpe de Estado» en el que se la acusa de sedición y terrorismo.
Sin embargo, el Ministerio de Justicia indicó que su detención es por el caso denominado «golpe de Estado II» en el que es acusada por incumplimiento de deberes y resoluciones contrarias a la Constitución.
Durante su detención Áñez sufrió varios problemas de salud como una crisis por su hipertensión arterial y en una ocasión se autolesionó el brazo manifestando que ya no quería vivir.
La expresidenta transitoria meses atrás también presentó cuadros de hiperventilación, dolores agudos del estómago, descompensaciones y problemas renales, además de depresión.